domingo, 14 de noviembre de 2010

Aprender a convivir juntos.




Actualmente, las tecnologías están muy presentes en nuestras vidas, y debemos incluirlas en la vida de los niños, pero de manera productiva, enseñarles a hacer un buen uso de ellas.Por ejemplo, el ordenador, el cual ofrece servicios muy interesantes para los mismos pero deben de aprender a utilizarlo correctamente, en esto creo que deben interferir padres,maestros,..

Respecto a la televisión, no debemos prohibirla si no buscar programas adecuados a las diferentes edades de los niños. Existen series educativas y muy interesantes, como por ejemplo, Pocoyo, Dora la exploradora, etc. No debemos sentarnos con los niños a cualquier hora y ver cualquier programa,NO, debemos establecer aquellos programas que son los adecuados e integrarlos en la planificación de los mismos y en la nuestra,ya que es bueno compartir momentos con ellos, este sería uno de ellos,así tú podrías controlar la programación y pasar tiempo con él.

¿Quién no ha visto alguna vez un capitulo de Barrio Sésamo? Esto es un claro ejemplo de serie educativa. En la cual te enseñaban a contar, las vocales, etc.

Creo que debemos enseñar a los niños a convivir con la tecnología y no prohibirsela, sino enseñarles hacer un uso adecuado de la misma.


Ejemplo de serie educativa,Pocoyo.


sábado, 13 de noviembre de 2010

¡Fuera!

En primer lugar estableceremos que no es una serie infantil, pero emitida en horarios infantiles. En la cual se realiza una crítica a la sociedad de Japón, la cual espero que no sea como refleja. Trata de la vida cotidiana de un niño como ir a la compra, discusiones de pareja,..

Creo que esta serie debería de desaparecer mínimo del horario infantil, debido a que de educativa tiene poco, ¿Qué puede aportarle positivo a un niño una serie en la cual el niño solo trata de ligar con todas las chicas guapas, qué está enseñando el culo cada dos minutos, que está haciendo trastadas todo el día,qué no muestra nada de respeto hacía sus padres ni personas mayores de su entorno? Os aseguro que nada bueno.
Los maestros/as de cada centro deberían aportar a los padres algunas series que realmente sean educativas, porque muchas veces ellos mismos no se paran a ver el contenido de las mismas, cosa que deberían hacer.

Ejemplo de serie educativa.

Aquí os dejo un video con la canción de sin chan debido a que han eliminado todos los videos de dicha serie.

¿Responsabilidad?




Para comenzar, os plantearé una pregunta:

¿Cuántas veces habéis estado estudiando y acabáis en el ordenador, viendo la televisión, escuchando música, etc.?

Creo que no he sido la única a la que le ha sucedió. Estar tan tranquila estudiando en la habitación y no poder vencer la tentación de meterte en el ordenador, tener que irte a la biblioteca porque sabes que en tu casa no puedes estudiar debido a esto. Creo que también está ligado a la responsabilidad ya que cada uno debe ser responsable de sus hechos, pero no siempre es así.

La tecnología hace que se dedique menos tiempo al estudio. También hace que no nos molestemos tanto a la hora del mismo, por ejemplo, seamos realistas a ¿quién no le han mandado leer un libro y lo ha buscado en internet y no se lo ha leído? Creo que tenemos demasiadas facilidades a la hora del estudio, siempre se mira de una manera positiva, pero yo también le veo muchos aspectos negativos, hace que disminuyan las horas de estudio y a qué cada vez nos esforcemos menos en este.

martes, 2 de noviembre de 2010

¿Dónde estan los niños?




Al reflexionar en las tecnologías siempre pensamos en aspectos positivos: puedes mantenerte informado de todo, comunicarte con quien quieras en el momento que precises, etc. Pero no todo son ventajas.

Os planteo una pregunta: ¿Dónde están aquellos parques repletos de niños jugando al fútbol, saltando a la comba,..?

No hay que mirar mucho tiempo atrás, para recordar esa bonita imagen en la cual todos jugábamos juntos, nos divertíamos con una simple cuerda, un balón o sin ni si quiera eso, con jugar al escondite éramos felices.

En la actualidad, generalizando, los niños solo piensan en consolas tipo play station, ordenadores,.. No saben divertirse sin tecnología. Responsabilidad también de sus padres, que muchas veces no compran los juguetes adecuados a su edad o por no controlarles el tiempo de su uso, ya que hay tiempo para todo.

Esto también afecta a la comunicación, pensad en esta imagen y veréis como también os a sucedido: llegamos a una comida familiar, en la cual hay niños de diversidad edades, nos saludamos y al momento ves como algunos de tus primos sacan sus consolas del bolsillo del abrigo y se ponen a jugar, el niño no quiere ni comer, te acercas hablar con él y te ignora, él parece que ni está. Todo debido al uso de la consola. El resultado es que has visto a tu primo, os habéis saludado, pero no ha habido más comunicación de ese simple saludo.

En definitiva, genera muchos problemas de sociabilidad.

miércoles, 13 de octubre de 2010

Caperucita Roja

   
Había una vez una niña muy bonita. Su madre le había hecho una capa roja y la muchachita la llevaba tan a menudo que todo el mundo la llamaba Caperucita.Un día, su madre le pidió que llevase unos pasteles a su abuela que vivía al otro lado del bosque, recomendándole que no se entretuviese por el camino, pues cruzar el bosque era muy peligroso, ya que siempre andaba acechando por allí el lobo.Caperucita Roja recogió la cesta con los pasteles y se puso en camino. La niña tenía que atravesar el bosque para llegar a casa de la Abuelita, pero no le daba miedo porque allí siempre se encontraba con muchos amigos: los pájaros, las ardillas.De repente vio al lobo, que era enorme, delante de ella.
- ¿A dónde vas, niña?- le preguntó el lobo con su voz ronca.
- A casa de mi Abuelita- le dijo Caperucita.
- No está lejos- pensó el lobo para sí, dándose media vuelta.
 Caperucita puso su cesta en la hierba y se entretuvo cogiendo flores: 
- El lobo se ha ido -pensó-, no tengo nada que temer. La abuela se pondrá muy contenta cuando le lleve un hermoso ramo de flores además de los pasteles.
Mientras tanto, el lobo se fue a casa de la Abuelita, llamó suavemente a la puerta y la anciana le abrió pensando que era Caperucita. Un cazador que pasaba por allí había observado la llegada del lobo.El lobo devoró a la Abuelita y se puso el gorro rosa de la desdichada, se metió en la cama y cerró los ojos. No tuvo que esperar mucho, pues Caperucita Roja llegó enseguida, toda contenta.La niña se acercó a la cama y vio que su abuela estaba muy cambiada.
- Abuelita, abuelita, ¡qué ojos más grandes tienes!
- Son para verte mejor- dijo el lobo tratando de imitar la voz de la abuela.
- Abuelita, abuelita, ¡qué orejas más grandes tienes!
- Son para oírte mejor- siguió diciendo el lobo.
- Abuelita, abuelita, ¡qué dientes más grandes tienes!
- Son para...¡comerte mejoooor!- y diciendo esto, el lobo malvado se abalanzó sobre la niñita y la devoró, lo mismo que había hecho con la abuelita.

 Mientras tanto, el cazador se había quedado preocupado y creyendo adivinar las malas intenciones del lobo, decidió echar un vistazo a ver si todo iba bien en la casa de la Abuelita. Pidió ayuda a un segador y los dos juntos llegaron al lugar. Vieron la puerta de la casa abierta y al lobo tumbado en la cama, dormido de tan harto que estaba.
El cazador sacó su cuchillo y rajó el vientre del lobo. La Abuelita y Caperucita estaban allí, ¡vivas!.Para castigar al lobo malo, el cazador le llenó el vientre de piedras y luego lo volvió a cerrar. Cuando el lobo despertó de su pesado sueño, sintió muchísima sed y se dirigió a un estanque próximo para beber. Como las piedras pesaban mucho, cayó en el estanque de cabeza y se ahogó. En cuanto a Caperucita y su abuela, no sufrieron más que un gran susto, pero Caperucita Roja había aprendido la lección. Prometió a su Abuelita no hablar con ningún desconocido que se encontrara en el camino. De ahora en adelante, seguiría las juiciosas recomendaciones de su Abuelita y de su Mamá.